Último Día de Panes Sin Levadura

¡Hacer lo Imposible!

Fred R. Coulter—29 abril, 2016

www.idcb.org

 


¡Saludos a todos! ¡Bienvenidos al Último Día de la Fiesta de Panes Sin Levadura! ¡El tiempo sigue su marcha!

 

La forma en que Dios ha acomodado los Días Santos es muy interesante, porque ha puesto todo en su temporada y nos ha dado Su Palabra—la cual es absolutamente esencial desde Génesis hasta Apocalipsis.

 

¿Qué es lo que predicamos en el Último Día de Panes Sin Levadura? Porque hay un tema para este día. Veamos la instrucción de Pablo para Timoteo respecto a lo que deben hacer los ministros. La forma en la que lo expresa es muy interesante. Veamos lo que Pablo le escribió a Timoteo respecto a cómo él debía conducir su ministerio. Ésta es sólo un parte de ello—que tiene que ver con la predicación—porque también hay muchos otros aspectos a considerar respecto al ministerio, el servir a los hermanos y demás.

 

2-Timoteo 4:1: “Te encargo…” Y esto es interesante porque en aquel tiempo había muchos ministros falsos y doctrinas falsas entrometiéndose en la Iglesia.

 

Verso 1: “Te encargo, por tanto, a la vista de Dios, incluso del Señor Jesucristo, Quien está listo para juzgar a los vivos y a los muertos en Su manifestación y Su reino.” ¡Éste es un encargo fuerte de parte de Dios y de Cristo!

 

·                ¿Cómo debe enseñar y predicar un ministro?

·                ¿Qué es lo que debe de hacer un ministro?

 

Aquí hay varias cosas que Pablo le dice a Timoteo en cuanto a cómo luchar contra las doctrinas falsas, y en la actualidad tenemos el mismo problema multiplicado millones de veces.

 

Verso 2: “¡Predica la Palabra!...” Y esto es muy interesante— ¿no creen? Aquí está refiriéndose a la Palabra de Dios inspirada por Dios mismo—respirada y avivada por Dios—porque esto es lo que Dios quiere que sepamos. Es por eso que Él nos ha dado Su Biblia.

 

“…Urge en temporada y fuera de temporada… [No seas flojo; siempre sé diligente] condena, reprende, anima, con toda paciencia y doctrina.” Hay un tiempo para doctrina, y—como hemos visto con la Pascua y la Fiesta de los Panes Sin Levadura—existen asuntos doctrinales en cuanto a la secuencia de las cosas, y las fechas en que se deben celebrar los eventos (por ejemplo). La doctrina significa ¡enseñanza!

 

Verso 3: “Porque vendrá un tiempo…” –que fue justo después de la muerte de los apóstoles (y en especial después de la muerte del apóstol Juan) en el cual todo voló en pedazos. De ahí surgió la Iglesia Católica Romana en el año 325 d.C.

 

Verso 3: “Porque vendrá un tiempo cuando ellos no tolerarán la sana doctrina…” ¿No es interesante que la Fiesta de los Panes Sin Levadura nos enseñe a vivir por cada palabra de Dios, y a ser celosos y diligentes sobre ciertas cosas? La naturaleza humana está inclinada a que:

 

·                Seamos flojos

·                Nos desilusionemos

·                Nos desalentemos

·                A que dejemos las cosas para mañana

ü    Y mañana se convierte en pasado mañana

ü    Pasado mañana se convierte en la próxima semana

ü    La próxima semana se convierte en el próximo mes

 

Y he aquí, somos como un hombre perezoso que se sienta con los brazos cruzados, y que no sabe que la ruina vendrá sobre él.

 

Es por eso que debemos enseñar el camino que Dios quiere que enseñemos. Y nosotros hemos visto esto a lo largo de nuestra vida— ¿No es así?

 

“…sino de acuerdo a sus propias lujurias acumularán para sí mismos un gran número de maestros, teniendo picazón de oídos por oír lo que satisfaga sus antojos” (verso 3). ¡Esto es absolutamente cierto en la actualidad! Nosotros tenemos cientos y cientos, e incluso miles de cosas que nos distraen ¡y nos alejan de la Verdad de Dios!

 

Miren lo que sucede cuando llegamos a un cierto punto. Nosotros podemos ser flojos y luego arrepentirnos y vencer… pero miren lo que sucede si seguimos hacia adelante sin apegarnos a la Verdad, y a la justicia, y a la doctrina de la Palabra de Dios:

 

Verso 4: “Y alejarán sus propios oídos de la verdad…” En otras palabras, ¡Ellos no querrán escuchar la Verdad! ¿No es esa la forma en que opera la naturaleza humana? ¡No quiere ser confrontada con la Verdad!

 

“…y serán desviados hacia mitos” (verso 4). ¿Cuáles? Ustedes los conocen:

 

·                Navidad

·                Pascua Florida

·                Año Nuevo

 

¡Y todos los días festivos de esa clase!

 

Es por eso que Dios ha puesto todos los Días Santos en un solo lugar: Levítico 23. Nosotros ya celebramos el primer Día de Panes Sin Levadura, y es interesante cómo ha funcionado la secuencia en este año (cayendo el último día en viernes, para después celebrar el sábado).

 

Recuerden que: el Calendario Hebreo Calculado es la única manera de poder determinar cuándo guardar las Fiestas de Dios. Que de hecho, acabamos de enviarles el calendario más reciente para los próximos siete años.

 

Levítico 23:4: “Estas son las fiestas designadas del SEÑOR…”

 

·                ¡Él es Quien las designa!

·                ¡Le pertenecen a Él!

·                ¡Él las creó!

·                ¡Nosotros debemos observarlas!

 

“…Santas convocaciones…” (Verso 4)—una reunión especial en el nombre del Señor porque: Él ha hecho una cita con nosotros, y porque vamos a aprender a través de Su Palabra y de Su Espíritu.

 

Es como lo que dijo Jesús acerca del escriba: ‘El escriba enseñará cosas, echando mano de las cosas—algunas nuevas, algunas viejas—poniéndolas todas juntas para que podamos aprender, y ser reforzados y fortalecidos.

 

“…las cuales proclamarán en sus temporadas designadas. En el catorceavo día del primer mes, entre las dos noches, es la Pascua del SEÑOR… [La cual hemos guardado]…Y en el quinceavo día del mismo mes es la Fiesta de Panes sin Levadura al SEÑOR…” (Versos 4-6)—Comenzando con la Noche para ser muy observada, la cual da inicio al Día Santo—el primer día de la Fiesta de los Panes Sin Levadura.

 

Verso 8: “Sino ofrecerán una ofrenda por fuego al SEÑOR siete días…” Para el último día de la Fiesta de los Panes Sin Levadura. Es muy interesante:

 

“En el séptimo día tendrán una santa convocación. No harán trabajo servil en el” (Verso 8). Hoy es ese día.

 

Nosotros siempre llevamos una ofrenda en los Días Santos. No voy a extenderme en este punto porque todos sabemos lo que Dios ordena. Sabemos que si Dios es primero en nuestra vida, entonces también debe ser primero en nuestro presupuesto.

 

Estoy seguro que ya recibieron el nuevo libro: ‘From a Speck of Dust to a Son of God: Why Were You Born?’ De un Puntico de Polvo a un Hijo de Dios: ¿Por Qué Nació Usted? (Aunque aún está pendiente por traducir al español). Ese será un libro maravilloso que va a ayudar a mucha gente. Estoy convencido de que van a disfrutar todo sobre él con la versión en audio, y con los dos DVD con las series de ‘Church at Home’ o  Iglesia en casa (churchathome.org)

 

Esto solo demuestra que todos los diezmos y las ofrendas que entran, están siendo utilizados para servir a los hermanos. No los utilizamos para glorificarnos a nosotros mismos; los utilizamos:

 

·                Para servir a los hermanos

·                Para servir a Dios

·                Para alimentar al rebaño

 

…para que ustedes puedan crecer en gracia y en conocimiento, puedan alcanzar un estado completamente sin levadura en la resurrección, y ¡puedan estar en el Reino de Dios!

 

(Pausa para ofrenda)

 

Muchas veces Dios nos guía en un camino diferente al que nosotros pensamos que deberíamos caminar. Esto es exactamente lo que Dios hizo al traer a los hijos de Israel fuera de Egipto. Ellos salieron al comienzo del 15to día del 1er mes –la Noche para ser Muy Observada para el Señor—iniciando así su Éxodo de Egipto.

 

Dios conocía las mentes y corazones de todo el pueblo, y esto es lo que dice después de que ellos se alegraron por haber partido. Estaban dejando a todos los egipcios y a Faraón.

 

Éxodo 13:17: “Y sucedió, cuando el Faraón había dejado ir al pueblo, Dios no los llevó por el camino de la tierra de los filisteos…” Esa era una ruta para ir de Egipto por la orilla del Mar Mediterráneo para ir a la ‘Tierra Santa.’ Esa era la ruta fácil y rápida, pero Dios tenía muchas otras cosas en mente que Él quería hacer con el pueblo, por el pueblo… y darles Su Ley.

 

Verso 18: “…Y los hijos de Israel subieron armados de la tierra de Egipto. Y Moisés llevó los huesos de José con él, porque él había jurado estrictamente a los hijos de Israel, diciendo, ‘Dios seguramente los visitará, y ustedes cargarán mis huesos fuera de aquí con ustedes.’ Y ellos se movieron de Sucot y acamparon en Etam, a la orilla del desierto. Y el SEÑOR iba delante de ellos de día en un pilar de una nube para guiarlos en el camino, y de noche en un pilar de fuego para darles luz, para ir de día y de noche. Él no quitó el pilar de la nube en el día, ni el pilar de fuego en la noche de delante del pueblo” (versos 18-22).

 

¡Miren lo que Dios hizo deliberadamente! ¡A veces Dios hace esto en nuestras vidas también, para mostrarnos Su intervención! En este caso, para mostrar Su poder a los hijos de Israel y para destruir a los Egipcios.

 

Éxodo 14:1: “Y el SEÑOR habló a Moisés, diciendo, ‘Habla a los hijos de Israel que giren y acampen delante de Pi Hahirot entre Migdol y el mar, enfrente de Baal-zefón. Ustedes acamparán delante de el junto al mar’” (versos 1-2).

 

Para ir a la ‘Tierra Santa’ había que ir por la tierra de los Cananeos, pero para ir por el camino que Dios quería, había que girar hacia el sur. Así que ellos descendieron a la orilla del Mar Rojo, donde había un lugar muy estrecho para acampar. Detrás de ellos estaban las montañas, y enfrente de ellos estaba el mar.

 

Aquellos quienes realmente no creen en Dios, dicen que había como una especie de ciénaga o marjal por donde cruzaron los israelitas. ¡Pero no! Ellos estaban tratando con el Dios Creador Quien creó los cielos y la tierra, y Él quería mostrarles un gran despliegue de Su poder para destruir a los Egipcios. Así que Dios los trajo ahí.

 

Ahora, Faraón y todos los que estaban en Egipto se dijeron a sí mismos: ‘¿Qué hemos hecho? ¡Hemos dejado ir a todos nuestros esclavos!’ ¡Piénsenlo! Es como si usted se deshiciera de todos sus dispositivos eléctricos y electrónicos (por mencionar un ejemplo moderno). Les aseguro que no pasaría mucho tiempo hasta que dijera: ‘¡No tengo nada!’ Eso es lo que pensarían muchas personas, y así es como ellos se sentían:

 

¡Nuestros esclavos se han ido! ¡Tengo que preparar mi propia comida! ¡Tengo que traer mi propia agua! Oímos que se fueron por el camino del Mar Rojo, ¡así que vamos a ir por ellos!

 

Y eso fue exactamente lo que sucedió. Faraón tomó su ejército—de 600 carros con todos los hombres de guerra—y salieron con furia diciendo, ‘Vamos a ir por nuestros esclavos porque los necesitamos.’

 

Verso 8: “Y el SEÑOR endureció el corazón del Faraón, rey de Egipto. Y él persiguió a los hijos de Israel, y los hijos de Israel salieron con mano fuerte. Entonces los egipcios los persiguieron, todos los caballos y carruajes del Faraón, y sus jinetes, y su ejército. Y los alcanzaron acampando junto al mar, al lado de Pi Hahirot, delante de Baal-zefón. Y cuando el Faraón se acercó, los hijos de Israel levantaron sus ojos. Y, he aquí, los egipcios marchaban tras ellos. Y ellos estaban muy asustados…” (versos 8-10). ¡Acababan de salir! Estaban todos felices y en marcha. ¿Se imaginan todas las canciones que deben haber ido cantando mientras caminaban alegremente? Y de repente voltean y ven, ‘¡Miren! ¡Ahí vienen lo Egipcios!’

 

¿Acaso Dios se equivocó? ¡Miren cómo se asustaron! Recuerden: Van a haber tiempos en los que vamos a tener pruebas para que confiemos en Dios. Cuando eso suceda, pídanle a Dios para que los ayude a través de la prueba y no se asusten.

 

“…Y los hijos de Israel clamaron al SEÑOR. Y le dijeron a Moisés…” (versos 10-11). Vamos a ver algunas cosas muy interesantes en el sermón del día de hoy. ¡Dios hace cosas por nosotros, que nosotros no podemos hacer! Pero cuando vienen los problemas, siempre hay naturaleza humana. ¿Saben qué es lo primero que hace la naturaleza humana? ¡Acusar a alguien más!

 

Entonces, ¡Eso fue lo que hicieron! Ellos fueron a Moisés y le dijeron: “…‘¿Nos has sacado para morir en el lugar desolado porque no habían tumbas en Egipto?...’” (verso 11). ‘¿Por qué tenemos que ser sepultados aquí? ‘¡Pudimos haber sido sepultados en Egipto!’

 

“…¿Por qué has tratado de esta forma con nosotros para sacarnos de Egipto?’” (verso 11). Estaban reconsiderándolo. Algunas personas pueden recondsiderar cosas como: ‘No estoy seguro sobre este grupo pequeño’ o ‘Miren cómo está el mundo. No pueden todos estar mal ¿o si?’

 

Miren cómo ellos cambiaron su versión de la historia, porque al principio del libro de Éxodo dice que estaban gimiendo y llorando por la esclavitud y el maltrato que sufrían. Ellos clamaron a Dios, y Dios le dijo a Moisés. ‘He oido su clamor; voy a ir a rescatarlos.’

 

Miren cómo cambiaron su versión de la historia, verso 12: “¿No te dijimos esta palabra en Egipto, diciendo, ‘Déjanos solos para que podamos servir a los egipcios?’ porque hubiera sido mejor para nosotros servir a los egipcios que morir en el lugar desolado.”

 

·                ¡El camino de Dios no es justo!

·                ¿Por qué hizo esto?

·                ¿Por qué tenemos que sufrir?

·                ¿Por qué es tan diícil?

 

Verso 13: “Y Moisés dijo al pueblo, ‘¡No teman!...’” Y eso es exactamente lo que nosotros debemos hacer. Vamos a enfrentar tiempos terribles en el futuro, y esto es lo que necesitamos: “…¡No teman!...” No vayan a entregarse a los Egipcios, ni digan: ‘¡Aquí estoy, te espero pero no me mates!’

 

“…Permanezcan quietos y vean la salvación del SEÑOR el cual Él obrará por ustedes hoy…[Dios tiene un propósito en mente para lo que Él va a hacer] …porque los egipcios a quienes han visto hoy, ¡nunca los verán de nuevo! El SEÑOR peleará por ustedes, y ustedes estarán quietos” (versos 13-14).

 

Entonces, esto nos revela el tema para el día de hoy, que es: ¡Sólo Dios puede hacer lo imposible! ¡Sólo Él puede ayudarnos y rescatarnos!

 

·                Él es Quien nos llamó a salir de este mundo

·                Él es Quien nos trajo al punto del bautismo y de recibir el Espíritu Santo

·                Él es Quien ha abierto nuestra mente a la Palabra de Verdad

 

—lo cual es más grandioso que lo que sucedió con los hijos de Israel en el Mar Rojo. El SEÑOR peleará por ustedes, y ustedes estarán quietos.”

 

Verso 15: “Y el SEÑOR dijo a Moisés, ‘¿Por qué clamas a Mí?... [Porque a Moisés también le afectó] …Diles a los hijos de Israel que avancen.’” Otro tema que podemos ver en esta historia, es que: ¡Debemos avanzar hacia el Reino de Dios! No retrocedemos hacia Egipto. ¡Avanzamos!

 

Verso 16: “Y tú—levanta tu vara, y estira tu mano sobre el mar, y divídelo. Y los hijos de Israel irán sobre tierra seca por en medio del mar.” Esa debe haber sido una experiencia fantástica. Estaba muy profundo por donde ellos pasaron.

 

Ahora, cuando Dios hace algo tan grande como esto… a los hombres les gusta minimizarlo. Bueno, a Dios le gusta maximizarlo, y ahí mismo él obro otro milagro:

 

Verso 17: “Y he aquí, estoy a punto de endurecer los corazones de los egipcios, y ellos los seguirán. Y tendré honor para Mí mismo sobre Faraón, y sobre todo su ejército, sobre sus carros y sobre sus jinetes. Y los egipcios sabrán que Yo soy el SEÑOR cuando sea glorificado a través de Faraón, sus carros, y sus jinetes.” (versos 17-18). Ese fue un mensaje para Moisés.

 

Entonces, ¿Qué hizo Dios? Aquí estaban los hijos de Israel junto al mar. Aquí venían los Egipcios para bloquearlos. Y ¿Qué hizo Dios? Envió una nube que se interpuso entre ellos:

 

Verso 19: “Y el ángel de Dios, quien iba delante del campamento de Israel, se movió. Y fue a la parte trasera de ellos. Y el pilar de la nube fue desde el frente de ellos y permaneció tras ellos. Y vino entre el campamento de los egipcios y el campamento de Israel. Era una nube de oscuridad para unos, pero daba luz durante la noche a los otros, de modo que los dos no se acercaron uno al otro en toda la noche. Y Moisés estiró su mano sobre el mar. Y el SEÑOR hizo retroceder el mar con un fuerte viento occidental toda aquella noche, e hizo el mar tierra seca, y las aguas fueron divididas. Y los hijos de Israel entraron en el medio del mar sobre la tierra seca…” (versos 19-22).

 

Como ellos acamparon en una fila larga, no había espacio para que se organizaran más cerca unos de otros. Cuando cruzaron el Mar Rojo, Dios lo abrió muy a lo ancho, y todos tuvieron que cruzar en un ‘movimiento de flanqueo’—el cual es un término militar—para poder cruzar el Mar Rojo Rápidamente. No sé que tan ancho haya sido la apertura, pero yo me imagino que bastante. No creo que haya sido como en las películas de El Éxodo y Los Diez Mandamientos, en las que entran por un canal estrecho al Mar Rojo. ¡No! ¡Esta apertura fue amplia!... y debe haber sido algo tremendo para Faraón y los soldados que la presenciaron: ‘¡Miren! ¡El agua llega hasta allá arriba!’

 

Cuando los hijos de Israel cruzaron el mar, llegaron al otro lado temprano por la mañana. Entonces Dios levantó la nube de entre ellos y los Egipcios, y éstos vieron que los hijos de Israel habían cruzado el Mar Rojo. Dios puso en los corazones de los Egipcios el ir tras los hijos de Israel, porque Él tenía un plan:

 

Verso 22: “Y los hijos de Israel entraron en el medio del mar sobre la tierra seca. Y las aguas eran un muro para ellos a su mano derecha y a su izquierda. Y los egipcios persiguieron y fueron tras ellos hasta la mitad del mar, todos los caballos del Faraón, sus carros, y sus jinetes. Y en la vigilia de la mañana… [justo al amanecer] …sucedió que el SEÑOR miró hacia abajo sobre el ejército de los egipcios a través del pilar de fuego y de la nube, y el ejército de los egipcios fue presa de confusión” (versos 22-24). ¡Así es como pelea Dios!

 

A manera de comentario, quisiera mencionar que los hijos de Israel no debían salir a la guerra a menos que Dios dijera, ‘Vayan a la guerra y Yo pelearé por ustedes.’ Esto es algo que vamos a ver en muchas instancias mientras repasamos el significado de este día. Cuando ellos salían a la guerra sin Dios, ¡Perdían! Así que, ¡ésta es la manera en que Dios pelea! ¡Él causó confusión entre los Egipcios! Ellos no supieron qué hacer.

 

Verso 25: “Y Él soltó las ruedas de sus carros… [¡BOOM! ¡BOOM! ¡Se cayeron!] …y los hizo ir pesadamente, de modo que los egipcios dijeron, ‘Huyamos de la cara de Israel, porque el SEÑOR pelea por ellos contra los egipcios.’” ¿Qué les parece?

 

Es por eso que otra de las lecciones de este día, es: No quejarnos ni acusar a otra persona; sino buscar a Dios y pedirle Su ayuda. Debemos recordar que: ¡Dios pelea por nosotros! y que nosotros debemos de poner las cosas en manos de Dios.

 

Verso 26: “Y el SEÑOR dijo a Moisés, ‘Estira tu mano sobre el mar, para que las aguas puedan volver sobre los egipcios, sobre sus carros, y sobre sus jinetes.’” ¡BANG! Las aguas se cerrraron y todos ellos murieron. ¡Todo fue destruído sin quedar nada!

 

Los hijos de Israel se alegraron y regocijaron, alabando a Dios y agradeciéndole por este acto tan grande y maravilloso que Él había hecho. En la primera parte de Éxodo 15 podemos ver cómo ellos alabaron y le dieron gloria a Dios por todo esto, y así fue como los hijos de Israel salieron de la tierra de Egipto.

 

Ahora, esto también tuvo un efecto secundario: Dios dijo que esto se daría a conocer en todas las naciones de alrededor (que Él había peleado por los hijos de Israel y los había liberado). Él dijo que pondría temor de los hijos de Israel en los ojos de quellos a quienes conquistarían… para así completar la batalla y ayudarlos a tomar posesión de la tierra.

 

Los hijos de Israel tenían un largo camino que recorrer (porque primero tenían que ir al Monte Sinaí). Desde el día en que dejaron Egipto hasta que llegaron al Monte Sinaí fueron siete semanas. Así que esto se relaciona con Pentecostés, de lo cual hablaremos más a medida que nos acerquemos a la Fiesta.

 

Pero de nuevo, aquí está lo que necesitamos aprender de esto; Éxodo 15:23: “Y cuando llegaron a Mara… [porque ellos habían llegado al desierto de Shur donde encontraron agua] …no podían beber de las aguas de Mara porque eran amargas. Por tanto el nombre de ella fue llamado Mara.”

 

Miren la memoria tan corta que tienen las personas, verso 24: “Y la gente murmuró contra Moisés, diciendo, ‘¿Qué beberemos?’”

 

Deténganse y piensen en esto un minuto: ¿Cuántas plagas vieron los hijos de Israel descender sobre los Egipcios antes de salir? ¿Cuántas cosas tan fantasticas habían presenciado? ¡Dios los libró! Y ¡Ellos salieron y cruzaron el Mar Rojo!

 

Esta es otra lección para nosotros: Cuando las cosas se vuelvan difíciles, no culpe a Dios. Vaya ante Él y pídale Su ayuda. Vaya ante Él, y pídale que intervenga. 

 

Miren lo que hizo el pueblo. Ellos no dijeron ‘¡Oigan todos! El agua no es buena para beber. ¿Qué les parce si nos reunimos todos aquí, y le pedimos a Dios de rodillas que la limpie para que podamos beberla?’ ¡Wow! Esa habría sido una historia completamente diferente— ¿No es así? ¡Por supuesto!

 

Verso 24: “Y la gente murmuró contra Moisés, diciendo, ‘¿Qué beberemos?’ Y él exclamó al SEÑOR. Y el SEÑOR le mostró un árbol. Y cuando él lo había echado en las aguas, las aguas fueron hechas dulces. Allí Él hizo un decreto y una ley para ellos, y allí Él los probó” (versos 24-25).

 

Así que:

·                Nuestra fe va a ser probada

·                Nuestra firmeza va a ser probada

§    ¿Creemos en realidad?

§    ¿Entendemos en realidad?

 

Todas estas cosas van a afectarnos, y es por eso que debemos aprender la lección de este Último Día de la Fiesta de Panes Sin Levadura.

 

Verso 26: “Y él dijo, “Si diligentemente escucharan a la voz del SEÑOR su Dios…’” Recuerden estas tres palabras: ¡Obedezcan Mi voz! Noten que es condicional: Si ustedes escuchan—lo cual quiere decir escuchar la voz de Dios y obedecerla, entonces ¡Dios los bendecirá!

 

“…‘Si diligentemente escucharan a la voz del SEÑOR su Dios, e hicieran lo que es correcto en Su vista, y dieran oído a Sus mandamientos, y guardaran todas Sus leyes, no pondré ninguna de estas enfermedades sobre ustedes, las cuales he traído sobre los egipcios; porque Yo soy el SEÑOR Quien los sana’” (verso 26). Y es grandioso saber que:

 

·                ¡Dios nos sanará!

·                ¡Dios nos sana desde ahora!

·                Que nosotros lo buscamos

Y también nos muestra que hay dos cosas que necesitamos hacer:

1.              Escuchar la voz de Dios

2.              Obedecerle

 

Quizá haya algo físico que necesite hacerse para consumar esto, como esto que vemos de echar el árbol en el agua.

 

“…e hicieran lo que es correcto en Su vista, y dieran oído a Sus mandamientos, y guardaran todas Sus leyes, no pondré ninguna de estas enfermedades sobre ustedes, las cuales he traído sobre los egipcios…” (Verso 26).

 

Deténganse y piensen en esto un minuto: Miren todas las enfermedades y dolencias que tenemos ahora en este mundo moderno. Aquí está la respuesta a ese problema:

 

·                ¿Han abandonado a Dios?

·                ¿Le han dado ellos la espalda a Dios?

·                ¡En efecto! ¡Ciertamente lo hicieron así!

 

El Salmo 78 es un Salmo muy interesante porque relata el éxodo de los israelitas, y nos muestra que los hijos de Israel:

 

·                No le creyeron a Dios

·                No obedecieron a Dios

·                No hicieron las cosas que Dios les dijo que hicieran

 

Es por eso que tenemos la historia. Tenemos la Ley, y luego tenemos: Josué, Jueces, 1era & 2da de Samuel, y 1era & 2da de Reyes. Todos estos nos cuentan la historia de lo que hicieron los hijos de Israel. ¡Ellos no siguieron a Dios!

 

Salmos 78:14: “Y en el día Él los guio con una nube, y toda la noche con una luz de fuego. Él partió las rocas en el lugar desolado, y les dio de beber, como de las grandes profundidades” (versos 14-15). Dios hizo muchos milagros por ellos. El agua fluyó de las rocas como si hubiera salido de las grandes profundidades.

 

Verso 16: “Él sacó arroyos también fuera de la roca, e hizo que aguas corrieran como ríos. Sin embargo ellos continuaron pecando aún más contra Él al revelarse contra el Altísimo en el lugar desolado. Y tentaron a Dios en sus corazones al pedir comida para sus lujurias” (versos 16-18).

 

Lo que ellos debían haber hecho, era decir: ‘Miren, Dios ha hecho todas estas cosas por nosotros, y Él puede proveer comida para nosotros.’ Dios ya tenía pensado enviarles el maná, y ahí también tenemos esa lección para nosotros.

 

¡Los israelitas pecaron contra Dios una y otra vez! E incluso después de enviarles la carne—o las codornices—vino una plaga sobre ellos.

 

Verso 30: “Ellos no se volvieron de sus lujurias, sino mientras su comida estaba aún en sus bocas, La ira de Dios vino sobre ellos y mató lo más fuerte de ellos, y golpeó a los hombres escogidos de Israel. Por todo esto ellos todavía pecaron y no creyeron en Sus obras maravillosas” (versos 30-31).

 

·                ¿No es ésta una realidad en las personas?

·                ¿Cuánto nos cuesta realmente creerle a Dios?

 

Es por eso que en el Nuevo Pacto, Él nos ha dado Su Espíritu Santo:

 

·                Para conducirnos

·                Para guiarnos

·                Para ayudarnos

 

Verso 33: “Por tanto Él terminó sus días en vanidad y sus años en terror.” Me pregunto: ¿Por qué tendremos la guerra del terror sobre nosotros?

 

Verso 34: “Cuando los mató… [Y esto es típico]…entonces ellos lo buscaron…”

 

‘¡Oh Dios! ¿Por qué nos pasó esto?’ Es como lo que sucedió en 9/11 ¿no es así? Fue algo tan trágico y terrible, que incluso el presidente les dijo a todos que fueran a su iglesia o sinagoga. Bueno, ¡eso sólo duró unas tres semanas!

 

“…y se volvieron y buscaron a Dios fervorosamente. Y recordaron que Dios era su Roca, y que el Dios Altísimo era su Redentor. Sin embargo…” (Versos 34-36). Y es por eso que guardamos la Fiesta de los Panes Sin Levadura, para que sepamos que tenemos que vivir como Dios quiere.

 

“…ellos lo halagaron con sus bocas, y le mintieron con sus lenguas” (verso 36). ¿Acaso no describe esto perfectamente el cristianismo del mundo en la actualidad? ¡Así es!

 

Verso 37: “Porque su corazón no era recto con Él; ni fueron fieles en Su pacto. Pero… [Noten la misericordia y compasión de Dios]: …Él, estando lleno de compasión, perdonó su iniquidad y no los destruyó; sí, muchas veces Él apartó Su enojo y no avivó toda Su ira, porque recordó que eran solo carne, un viento que pasa y no viene otra vez. ¡Qué tan frecuente lo provocaron en el lugar desolado y lo afligieron en el desierto! Y todavía nuevamente tentaron a Dios, y limitaron al Santo de Israel” (versos 37-41). ¡Esa es toda una lección para nosotros!

 

Ahora veamos en otro de los Salmos, cómo es que Dios interviene por nosotros. Y una gran parte de esto tiene que ver con:

 

·                La oración diaria

·                El estudio diario de la Biblia

·                El escuchar diariamente la Palabra de Dios

 

Van a haber tiempos en los que estemos abrumados. Y al igual que los hijos de Israel enfrente del Mar Rojo, es posible que nos preguntemos ‘¿Cómo vamos a cruzar eso?’ A veces los problemas llegan como las olas del mar.

 

Salmos 3:1: “Oh SEÑOR, ¡cómo se han incrementado mis enemigos! Muchos son los que se levantan contra mí. Muchos están diciendo de mi alma, ‘No hay salvación para él en Dios.’ Selah.” (Versos 1-2). Y cada vez que vean la palabra ‘Selah’ recuerden que significa: ¡Detente, y piensa en esto! ¡Medita en esto!

 

Verso 3: “Pero Tú, Oh SEÑOR, eres un escudo alrededor mío, mi gloria, y Aquel Quien levanta mi cabeza. Clamé al SEÑOR con mi voz, y Él me respondió de Su santo monte. Selah” (versos 3-4). ¡Deténganse y piensen en esto!

 

·                Oren a Dios, ¡Que Él oirá y responderá!

·                Pídanle a Él que les ayude, y ¡Él estará ahí!

 

Va a haber ocasiones en las que tengamos que pasar por ciertas cosas, ¡pero Dios siempre responde nuestras oraciones! Así que, ¡busque a Dios para todo!

 

El Salmo 25 también habla sobre cómo nos acercamos a Dios, sobre cómo nos rendimos ante Él, y sobre cómo podemos crecer y vencer.

 

Salmos 25:17: “Los problemas de mi corazón son aumentados; Oh sácame de mis angustias.” ¿Qué les parece? Así es como debemos orar a Dios, porque ¡Él lo hará!

 

Verso 18: “Mira sobre mi aflicción y mi dolor, y perdona todos mis pecados… [Pídale a Dios que le ayude] …Considera a mis enemigos, porque ellos son muchos; y me odian con cruel odio. Oh guarda mi alma y líbrame… [Pídale a Dios que le ayude cuando lleguen los problemas; pídale a Dios que intervenga. Él lo librará] …no me dejes ser avergonzado, porque yo tomo refugio en Ti. Que integridad y rectitud me preserven, porque yo espero en Ti. Redime a Israel, Oh Dios, de todos sus problemas” (versos 18-22). Y usted puede poner su nombre ahí. ¡Dios nos libra de todos nuestros problemas!

 

Salmos 33:18: “He aquí, el ojo del SEÑOR está sobre aquellos quienes Le temen, sobre aquellos quienes esperan en Su misericordia.”

 

Y ¿Qué hay de aquellos quienes tienen el Espíritu de Dios? Nosotros somos el centro de atención de Dios porque Él quiere que crezcamos en gracia y conocimiento, y que nos preparemos para entrar en Su Reino.

 

Verso 19: “Para salvar sus almas de muerte… [Hacia vida eterna] …y mantenerlos vivos en [tiempos de] hambre.” Ahora, esto no significa que si hay hambruna no van a padecer— sino que les mantendrá con vida.

 

Verso 20: “Nuestra alma espera por el SEÑOR; Él es nuestra ayuda y nuestro escudo,” Y en estas Escrituras que vamos a ver, ustedes podrán identificar:

 

·                La ayuda de Dios

·                Su escudo

·                Su protección

·                Su intervención

·                Su misericordia

 

Salmos 34:1: “Bendeciré al SEÑOR en todo tiempo; Su alabanza estará siempre en mi boca. Mi alma hará su alarde en el SEÑOR; el humilde oirá y se alegrará. Oh magnifica al SEÑOR conmigo, y exaltemos Su nombre juntos. Busqué al SEÑOR, y Él me respondió, y me libró de todos mis temores” (versos 1-4).

 

Esto es muy similar a lo que Dios les dijo a Moisés y a los israelitas en el Mar Rojo: ¡Quédense quietos! ¡No se asusten! ¡Yo pelearé por ustedes!

 

Verso 5: “Ellos miraron a Él y eran radiantes, y sus caras no fueron avergonzadas. Este pobre hombre gritó, y el SEÑOR oyó, y lo salvó de todos sus problemas” (versos 5-6). ¡Así es! Hay bastantes problemas que tenemos que enfrentar en el mundo ¿No es así? Y por eso es que necesitamos:

 

·                Tener fe en Dios

·                Confiar en Dios

·                Amar a Dios

·                Apoyarnos en Él

·                Buscarlo a Él

·                Pedirle Su ayuda

 

¡Esto es algo maravilloso cuando lo entendemos!

 

Miren la ayuda extra que ni siquera alcanzamos a percibir, verso 7: “El ángel del SEÑOR acampa alrededor de aquellos que le temen y los libra.”

 

Ahora veamos este mismo tema en el verso 6: “…lo salvó de todos sus problemas.”

 

Verso 8: “Oh gusta y ve que el SEÑOR es bueno; bendito es el hombre que toma refugio en Él.” Usted vaya a Dios, en lugar de recurrir a sus propios medios para ver qué es lo que va a hacer. Deje que Dios lo guíe en lo que necesite llevar a cabo.

 

Aquí está la manera en que debemos vivir, verso 14: “Apártate del mal y haz el bien…” Y ese es el tema de la Fiesta de Panes Sin Levadura:

 

·                Saque el pecado; introduzca la justicia

·                Deshágase de la levadura; coma el pan sin levadura de Dios

 

“…busca la paz y persíguela. Los ojos del SEÑOR están sobre el justo, y Sus oídos están abiertos a su grito” (versos 14-15). Dios ayudará; ¡Dios escuchará!… Y toda la lección del día de hoy es:

 

·                Que Dios peleará nuestras batallas por nosotros

·                Que Dios nos asistirá

·                Que Dios nos dará la fuerza, la resistencia, y todo lo demás que necesitemos

ü    Si confiamos en Él

ü    Si lo amamos

ü    Si nos unimos a Él

 

Verso 16: “El rostro del SEÑOR está en contra de aquellos que hacen mal, para cortar la memoria de ellos de la tierra. Los justos gritan… [Y aquí está nuevamente el tema del que venimos hablando] …y el SEÑOR oye, y los libra de todas sus tribulaciones” (versos 16-17).

 

Verso 6: “…lo salvó de todos sus problemas”

Verso 17: “…los libra de todas sus tribulaciones”

 

Verso 18: “El SEÑOR está cerca del quebrantado de corazón y salva a aquellos que son de espíritu contrito.”

 

·                ¡Dios sabe!

·                ¡Dios escucha!

·                ¡Dios va a resolver las cosas y a cambiar lo que sea que esté mal!

 

Verso 19: “Muchas son las aflicciones del justo, pero el SEÑOR lo libra de todas ellas.” ¡La liberación viene de Dios! ¡Es todo un tema el que estamos viendo el día de hoy!

 

Salmos 37:39: “Pero la salvación de los justos viene del SEÑOR… [Y ¿Cuál es esa salvación? Veámosla aquí]: …Él es su fuerza en el tiempo del problema.” La verdad es que, si lo pensamos bien… en realidad no tenemos mucha fuerza— ¿verdad que no? 

 

Aquí está el por qué, y así es como va a suceder. A veces es bueno leer primero la conclusión, y posteriormente el principio de algunos capítulos.

 

Verso 40: “Y el SEÑOR los ayudará y los librará; Él los librará de los malvados, y los salvará porque ellos toman refugio en Él.”

 

Es interesante. Miren lo que Dios quiere que hagamos para que esto suceda. Todo lo demás nos lleva a esto:

 

Verso 1: “[#1] No te corroas a ti mismo por causa de los malhechores, y no estés envidioso contra los trabajadores de iniquidad, Porque serán pronto cortados como el pasto; y marchitados como la hierba verde. Confía en el SEÑOR, y haz el bien; vive en la tierra, y ama fidelidad” (versos 1-3).

 

“…vive en la tierra…” — ¡Esté firme con el Señor!

 

Verso 4: “Deléitate en el SEÑOR…” Noten todo lo que dice aquí:

 

·                No te corroas

·                Confía

·                Haz el bien

·                Deléitate

·                Deléitate tú mismo en el Señor

 

“…y Él te dará los deseos de tu corazón. Encomienda tu camino al SEÑOR; confía también en Él, y Él lo hará suceder” (versos 4-5).

 

Esos cinco versos son realmente fantásticos, porque nos muestran cómo necesitamos confiar para todo. ¡Ese es el obrar de la fe! Es el proceso en el cual la fe de Dios trabaja en nosotros para que podamos:

 

·                Confiar en Dios

·                Buscarlo a Él

·                Encomendarnos nosotros mismos a Él

 

Veamos también lo que dice en el verso 6: “Y Él dará a luz tu justicia como la luz, y tu juicio como el mediodía. Descansa en el SEÑOR, y espéralo pacientemente; [#2] no te corroas a ti mismo por causa del que prospera en su camino; por causa del que lleva a cabo acciones malignas. Cesa la ira, y abandona la cólera; [#3] no te corroas a ti mismo…” (Versos 6-8).

 

Ahí está nuevamente: No te corroas a ti mismo (por tercera vez). No se frustre por las cosas que hacen los demás. Pídale a Dios:

 

·                Que intervenga

·                Que le dé gracia

·                Que le dé favor

·                Que remueva al enemigo lejos de nosotros

 

¡Es por eso que este día es tan grandioso! ¡Es un día en el que aprendemos a confiar en Dios y en Jesucristo! Así que:

 

·                No se corroa

·                Confíe

·                Haga el bien

·                Deléitese

·                Encomiéndese

·                Confíe

·                Dios lo hará suceder

·                Descanse en el Señor

·                No se corroa

·                Deje la ira

·                No se corroa

·                Espere en el Señor (verso 9)

 

Lo que quiero que hagan, es que tomen el Salmo 37 y lo estudien a profundidad. Si usted está en medio de problemas y dificultades en su vida, tome este Salmo de rodillas y léalo. Ore a Dios mientras lo lee. Pídale a Dios que intervenga en su vida y en sus circunstancias porque:

 

·                Usted las conoce

·                Dios las conoce

·                Usted no puede con ellas por usted mismo

·                Pídale a Dios que intervenga

 

Así es como Dios quiere que nos acerquemos a Él, y que confiemos en Él en todos estos males que nos aquejan.

 

(Ir a la pista siguiente)

 

2-Reyes 19 es todo un relato. Ustedes pueden leer el capítulo 18 a manera de introducción… pero el relato en sí habla de los asirios de aquel tiempo, quienes (después de muchas conquistas importantes) estaban listos para derribar Jerusalén y a todas las ciudades de Judá. Ellos amenazaban con llevárselos, matarlos, y saquear todo lo que tenían. Incluso enviaron a uno de sus generales para hablar con el pueblo que estaba sobre el muro de Jerusalén, quien les dijo: ‘Miren, nuestro gran Rey Senaquerib ha conquistado a estos dioses y a estas naciones. Ahora, si ustedes se rinden ante nosotros, les daremos algunos caballos y ustedes podrán irse.’

 

Pero, todo eso era una artimaña. Él les dijo que no confiaran en el rey Ezequías, si les decía ‘Dios los librará.’ ‘No le crean, porque ¿Acaso Dios ha librado a alguna de las otras naciones de nuestras manos? ‘¡Por supuesto que no!’

 

Ahora, cuando Ezequías oyó estas palabras, esto fue lo que sucedió: 2-Reyes 19:3: “Y ellos le dijeron, ‘Así dice Ezequías, “Este es un día de problema y de reprensión y desprecio, porque los hijos han llegado al punto de nacer, y no hay fuerza para dar a luz.”’” Así que, lo que la asamblea estaba diciendo era: ‘Miren, la situación aquí es que… estamos completamente indefensos.’

 

Verso 4: “‘Puede ser que el SEÑOR tu Dios oiga todas las palabras del comandante en jefe de campo, con las cuales su amo el rey de Asiria ha enviado a reprochar al Dios viviente, y reprenda las palabras que el SEÑOR tu Dios ha oído. Y tú levantes oración por el resto de aquellos quienes sean dejados.’ Y los siervos el Rey Ezequías vinieron a Isaías. E Isaías les dijo, ‘Ustedes le dirán a su amo, “Así dice el SEÑOR, ‘No estés temeroso de las palabras que has oído con las cuales los siervos del rey de Asiria me han blasfemado Mí. He aquí, Yo enviaré una explosión sobre él, y el oirá un rumor y volverá a su propia tierra. Y Yo haré que él caiga por la espada en su propia tierra.’”’” (Versos 4-7).

 

Los siervos del rey tomaron la carta que el comandante de campo les había dado, y se la dieron a Ezequías. Aquí está lo que hizo Ezequías, y esto es lo que nosotros debemos hacer cuando estemos en problemas:

 

Verso 14: “Y Ezequías recibió la carta de la mano de los mensajeros y la leyó. Y Ezequías subió a la casa del SEÑOR y la extendió delante del SEÑOR.”

 

Esto es lo que debemos hacer hermanos; tomar todos nuestros problemas y dificultades con un corazón humilde y arrepentido. Ezequías se visitó de cilicio, fue ante el Señor, oró, y expuso el problema de esta manera:

 

Verso 15: “Y Ezequías oró delante del SEÑOR y dijo, ‘Oh SEÑOR Dios de Israel, Quien moras entre el querubín, Tú eres Dios Mismo, sólo Tú, de todos los reino de la tierra; Tú has hecho los cielos y la tierra. SEÑOR, inclina Tu oído y oye. Oh SEÑOR, abre Tus ojos y ve, y oye las palabras de Senaquerib las cuales ha enviado para reprochar al Dios viviente. Verdaderamente, SEÑOR, los reyes de Asiria han destruido las naciones y sus tierras, Y han lanzado a sus dioses al fuego; porque ellos no eran dioses, sino la obra de manos de hombres, madera y piedra, y los han destruido. Y ahora, Oh, SEÑOR nuestro Dios, Te suplico, sálvanos fuera de su mano, para que todos los reinos de la tierra puedan saber que eres el SEÑOR Dios, y Tú solamente.’” (Versos 15-19).

 

Y la palabra vino a Isaías, y él fue a Ezequías, verso 20: “E Isaías el hijo de Amos envió a Ezequías, diciendo, ‘Así dice el SEÑOR Dios de Israel, “He oído lo que has orado a Mí contra Senaquerib rey de Asiria.”’” Y el Señor dijo que pelearía por él.

 

Veamos qué fue lo que pasó en esta historia, porque Dios nos ama, nos cuida, y nos quiere; verso 32: “Por lo tanto, así dice el SEÑOR concerniente al rey de Asiria. ‘Él no entrará en esta ciudad, ni disparará una flecha ahí, ni vendrá delante de ella con escudo, ni lanzará un banco contra ella. Por el camino que vino, por el mismo camino él volverá, y no entrará en esta ciudad,’ dice el SEÑOR, ‘Porque Yo defenderé esta ciudad, para salvarla por amor a Mí mismo y por amor a Mi siervo David.’” (Versos 32-34).

 

¡Qué manera de expresarlo! Dios es quien estaba haciéndolo. Ezequías era justo—aunque después tuvo sus problemas—pero él confió en el Señor. ¡Dios oyó! ¡Dios respondió! Veamos la forma en que lo hizo porque éste era un ejército enorme.

 

Verso 35: “Y aconteció esa noche, que el ángel del SEÑOR salió e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios…” ¡Los mató a todos! No sabemos exactamente cómo lo hizo, pero cuando Dios pelea nuestras batallas, ¡lo hace muy bien! ¡Él interviene!

 

Todos nosotros vamos a tener problemas y pruebas. Yo a veces miro hacia atrás en el tiempo que hemos estado sirviendo a Dios, y sí, ha habido muchos tiempos difíciles y pruebas. Sin embargo, ¡Dios nos ha librado de todos ellos! Estamos agradecidos por eso y lo recordamos. ¡Entendamos que este día de Panes Sin Levadura representa cómo Dios pelea por nosotros!

 

“…Ahora, cuando ellos se levantaron…” (Verso 35). Puedo imaginarme a aquellos que no murieron (y al rey) levantarse en la mañana y decirse unos a otros: ‘Está todo muy callado ¿no?’ ¡No oigo nada!’ Ciento ochenta y cinco mil soldados deben hacer mucho ruido al levantarse, y al preparar todas las cosas para la batalla. Pero aquí, ¡Aquí sólo había silencio! ¡Ni un ruido! ¡Todos estaban muertos!

 

“…temprano en la mañana, he aquí, todos eran cuerpos muertos. Y Senaquerib rey de Asiria partió. Y él se fue y volvió y vivó en Nínive” (versos 35-36). Donde después lo mataron dos de sus hijos.

 

Cuando Dios dice que Él va pelear por nosotros, ¡significa que Él va a pelear por nosotros! Y Él lo hará porque:

 

·                Nos ha llamado

·                Nos ama

·                Quiere que estemos en Su reino

 

¡Las pruebas y dificultades vienen para que aprendamos a crecer en gracia y en conocimiento!

 

Ahora vayamos al Nuevo Testamento. En 1-Corintios 10 vemos que todos los ejemplos de las cosas que le sucedieron al Antiguo Israel, deben ser lecciones para los Cristianos del Nuevo Pacto. Este capítulo nos habla un poco al respecto:

 

1-Corintios 10:1: “Entonces no quiero que sean ignorantes de esto, hermanos, que nuestros padres estuvieron todos bajo la nube, y todos pasaron a través del mar. Y todos fueron bautizados hasta Moisés en la nube y en el mar. Y todos ellos comieron la misma carne espiritual. Y todos ellos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebieron de la Roca espiritual que los seguía. Y esa Roca era Cristo. Pero con muchos de ellos Dios no estuvo complacido, pues sus cuerpos muertos fueron esparcidos en el lugar desolado. Estas cosas llegaron a ser ejemplos para nosotros… [O tipificaciones para nosotros] …para que podamos no codiciar cosas malas, como ellos también codiciaron” (versos 1-6).

 

Lo que Pablo está diciendo aquí es: Que si llegan a haber problemas y dificultades en nuestras vidas, que no sean por corrección de Dios porque hayamos pecado; que no sean porque no hemos estado haciendo lo que Dios quiere que hagamos.

 

Verso 7: “Ni sean idólatras, como fueron algunos de ellos…” Piensen en lo descarada que puede ser la naturaleza humana. Bueno, aquí ellos tenían a Dios en el pilar de nube durante el día y en el de fuego durante la noche… y aun así cometieron idolatría. Mientras Moisés estaba en la montaña recibiendo la Palabra de Dios, ellos se reunieron y le dijeron a Aarón: ‘No sabemos qué le ha pasado a este Moisés. Han sido muchos días desde que subió a la montaña, y no hemos sabido nada de él. Quizá la montaña sea un volcán y por eso se incendió. Tal vez Moisés se cayó en el fuego o ¿Quién sabe? ¡¿Por qué no haces dioses para nosotros?!’

 

Ustedes pueden leer el resto del relato en Éxodo 31. Así que, ¿Qué fue lo que hizo Aarón? Les dijo: ‘Tráiganme su oro’ ¡Y les hizo un becerro de oro! Les dijo: ‘Esta es una fiesta para el Señor’… ¡cuando en realidad no lo era! Ustedes conocen la historia. Cuando Moisés bajó del monte, se enojó tanto que arrojó las tablas en la que Dios había escrito los Diez Mandamientos con Su propio dedo.

 

“…como está escrito, ‘El pueblo se sentó a comer y a beber, y se levantó a jugar.’ Tampoco deberíamos cometer inmoralidad sexual, como algunos de ellos cometieron, y veintitrés mil fueron destruidos en un día. Tampoco deberíamos tentar a Cristo, como algunos de ellos también lo tentaron, y fueron muertos por serpientes. Ni deberíamos quejarnos contra Dios, como también algunos de ellos se quejaron, y fueron muertos por el destructor. Ahora todas estas cosas les sucedieron como ejemplos, y fueron escritas para nuestra exhortación, sobre quienes los fines de los siglos vienen. Por tanto, aquel que piense estar firme preste atención, para que no caiga.” (Versos 7-12).

 

En otras palabras, tenemos que acercarnos a Dios. Tenemos que crecer en fe y en conocimiento, y avanzar todos los días. Nunca se enaltezca ni piense que usted ha hecho esto o aquello—porque ahí es cuando está más vulnerable a dejarse llevar por la vanidad—y es donde empiezan los problemas y las dificultades.

 

Veamos qué dice el verso 13 respecto a los problemas y dificultades: “Ninguna tentación ha venido sobre ustedes excepto lo que es común para la humanidad. Porque Dios, Quien es fiel, no les permitirá ser tentados más allá de lo que son capaces de soportar; sino que con la tentación, Él hará un camino de escape, para que puedan ser capaces de soportarla. Por tanto, mis amados, huyan de la idolatría” (versos 13-14). La idolatría ya empezaba a meterse por ahí, y ¡este es un buen ejemplo para nosotros!

 

Ahora, nosotros también tenemos otro enemigo con el cual luchar, y es importante que lo entendamos. Ese enemigo que está tras nosotros todo el tiempo se llama Satanás el diablo. Veamos qué es lo que debemos hacer para no caer en esa trampa.

 

Efesios 6:10: “Finalmente, mis hermanos, sean fuertes en el Señor…” De eso se trata toda la Fiesta de Panes Sin Levadura: De cómo edificamos la fe, y aprendemos a confiar en Dios en todo lo que hacemos—no andando en nuestros propios caminos ni haciendo las cosas por nuestros propios medios.

 

Es cierto que debemos ser sabios y tomar buenas decisiones, pero “…sean fuertes en el Señor…”

 

“…y en el poder de Su fuerza… [Toda la fuerza viene de Dios] …Vístanse toda la armadura de Dios para que puedan ser capaces de aguantar contra las artimañas del diablo. Porque no estamos luchando contra carne y sangre, sino contra principados y contra poderes, contra los gobernadores del mundo de la oscuridad de este siglo, contra el poder espiritual de maldad en lugares altos” (versos 10-12).

 

Esto es lo que debemos hacer: Deshacernos del pecado; deshacernos de las cosas que nos estorban en nuestras vidas… y ¡Estar de parte de Dios! Veamos qué debemos hacer, y cómo debemos desarrollarnos y crecer. El objetivo de Israel era llegar a la ‘tierra prometida’ Nuestro objetivo, ¡es entrar al Reino de Dios!

 

Esta es una batalla espiritual, y el arma más fuerte que podemos tener es el amor de Dios. Debemos usar y ser guiados por el Espíritu de Dios.

 

Filipenses 2:1: “Entonces, si hay cualquier estímulo en Cristo, si cualquier consuelo de amor, si cualquier compañerismo del Espíritu, si cualquier profundo afecto interno y compasión…” Estas son las cosas en las que debemos crecer y desarrollar.

 

Verso 2: “Cumplan mi gozo, para que sean de la misma mente, teniendo el mismo amor, siendo unidos en alma, preocupándose de la única cosa”—la cual debe ser: alcanzar el Reino de Dios.

 

Verso 5: “Esté esta mente en ustedes…” Y ese es todo el propósito: que saquemos el pecado de nuestras vidas, que introduzcamos la justicia, y que desarrollemos la mente de Cristo.

 

Es por eso que debemos aprender la Palabra de Dios—Tanto el Antiguo como Nuevo Testamentos—y conjuntarla apropiadamente. Ahora, esto es algo que sólo puede llegar a nosotros por medio de la fe, y encaja con el tema del bautismo—con el salir del sepulcro de agua y el ‘caminar en novedad de vida.’

 

Gálatas 2:20: “He sido crucificado con Cristo, aun así vivo…” –porque salimos del sepulcro de agua, y tomamos:

 

·                El pecado

·                La lujuria

·                Los problemas

·                Las pruebas y las dificultades

Para trabajar en las cosas que tenemos que trabajar, y para que:

 

·                Confiemos en que Dios nos ayudará en las cosas que sobrepasen nuestra capacidad

·                Lo busquemos a Él para que pelee nuestras batallas por nosotros

 

“…aun así vivo. Ciertamente, ya no soy más yo; sino Cristo vive en mí… [Eso es lo importante] …Porque la vida que estoy ahora viviendo en la carne, la vivo por fe—esa misma fe del Hijo de Dios, Quien me amó y Se dio a Si mismo por mí” (verso 20).

 

Veamos cómo funciona esto, y la manera en que Pablo lo explica. La fe es parte del fruto del Espíritu de Dios. Nosotros como seres humanos tenemos una cierta cantidad de fe, pero la fe para salvación viene de Dios a través de Su Espíritu. Veamos cómo lo expresa Pablo en sus propias palabras:

 

Romanos 1:16: “Porque no estoy avergonzado del evangelio de Cristo porque es el poder de Dios hacia salvación para todos quienes creen…” Esa es nuestra fe hacia Dios, la cual es luego devuelta a nosotros a través de Cristo.

 

“…-—ambos, a los judíos primero, y a los griegos. Porque en él… [En el Evangelio] …la justicia de Dios es revelada…” (Versos 16-17). El verdadero propósito de la vida, es la justicia de amar a Dios y de guardar Sus mandamientos.

 

“…de fe hacia fe…” (Verso 17). La palabra griega para hacia es ‘eis’. Éste vocablo describe nuestra relación con Dios, la cual se basa en nuestra fe hacia Dios y en Su fe devuelta a nosotros “…de fe hacia fe…” La fe:

 

·                de Dios hacia nosotros

·                de nosotros hacia Dios

·                de la Palabra de Dios hacia nuestra mente y corazón

Y luego:

 

·                Hacia nuestras acciones

·                Hacia las cosas que hacemos

 

“…de acuerdo a como está escrito: ‘El justo vivirá por fe.’

 

·                Creyendo en Dios

·                Confiando en Dios

·                Teniendo esperanza en Dios

Y sabiendo que:

·                Él es nuestro Salvador

·                Él es nuestra ayuda

·                Él peleará nuestras batallas por nosotros

 

También necesitamos darnos cuenta, de que hay muchas, muchas cosas que Cristo nos ha prometido.

 

Veamos algo muy interesante que tiene que ver con la forma en que nos acercamos a Dios, y la forma en que crecemos y vencemos. Dios estará ahí para:

 

·                Ayudarnos

·                Levantarnos

·                Conducirnos

·                Guiarnos

 

Hebreos 4:12: “Porque la Palabra de Dios es viva y poderosa…” Y ahí pueden añadirle que es: verdadera, fiel, justa, buena, y que es el poder dentro de nosotros (junto con el Espíritu de Dios) que nos da la fuerza para seguir adelante.  

 

“…y más afilada que cualquier espada de dos filos, penetrando incluso a los pedazos divididos de alma y espíritu, de coyunturas y médula, y es capaz de discernir los pensamientos e intenciones del corazón” (verso 12).

 

De eso se trata toda la Fiesta de Panes Sin Levadura. Se trata de examinar nuestra mente, nuestro corazón, nuestras vidas, y las cosas que hacemos. Al examinar nuestra fe, debemos preguntarnos:

 

·                ¿Estoy confiando en Dios?

·                ¿Estoy creyendo en Dios?

·                ¿Estoy amando a Dios?

 

Todas estas cosas trabajan en conjunto para ayudarnos a crecer y vencer.

 

Verso 13: “Y no hay una cosa creada que no sea manifiesta a Su vista; pero todas las cosas están desnudas y descubiertas delante de Sus ojos a Quien debemos dar cuenta. Teniendo por lo tanto un gran Sumo Sacerdote, Quien ha pasado a los cielos, Jesús el Hijo de Dios, deberíamos sujetar firme la confesión de nuestra fe” (versos 13-14).

 

Ahora, además de crecer en gracia y en conocimiento, debemos:

 

·                Crecer en fe

·                Crecer en entendimiento

·                Crecer en sabiduría y experiencia

 

¡Toda esa ayuda proviene de Jesucristo!

 

Verso 15: “Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda empatizar con nuestras debilidades.” Todos tenemos dificultades y problemas que vencer. Él lo entiende, y está ahí para ayudar. ¡Él nunca nos abandonará!

 

“…sino uno Quien fue tentado en todas las cosas de acuerdo a la semejanza de nuestras propias tentaciones; aunque Él fue sin pecado. Por lo tanto, deberíamos venir con audacia al trono de gracia, para que podamos recibir misericordia y encontrar gracia para ayuda en tiempo de necesidad” (versos 15-16).

 

Veamos la promesa que Jesús nos ha dado. Si usted ha estado teniendo dificultades y problemas abrumadores, y siente como si las olas golpearan tanto contra usted que no lo dejan levantar la cabeza…

Recuerde que:

 

·                ¡Cristo está ahí!

·                ¡Él le ayudará!

·                ¡Él no lo defraudará!

 

Hebreos 13:5: “No permitan que el amor al dinero influencie su comportamiento, sino estén satisfechos con lo que tienen… [No se dejen llevar por la lujuria]: porque Él ha dicho… [Y quiero que piensen en esto que dice aquí]: En ninguna forma…’”

 

Deténganse y piensen en esto: Jesús es ¡el Camino, la Verdad, y la Vida! ¡Dios no puede mentir! ¡La Palabra de Dios es verdadera! Nosotros podemos tener fe en lo que Cristo está diciendo aquí, y podemos confiar en Él en todos nuestros tiempos de problemas. 

 

“…En ninguna forma los dejaré… [Y esto es de primordial importancia] …no—nunca los abandonaré en ninguna forma’” (verso 5). Esta es una afirmación muy poderosa en el griego, porque aquí hay tres negativos que son:

 

1.              En ninguna forma los dejaré

2.              No—en ninguna forma

3.              Nunca los abandonaré

 

Verso 6: “Así entonces, digamos valientemente, El Señor es mi ayudante, y no tendré temor, ¿Qué puede el hombre hacerme?’” ¡Es asombroso!

 

Así es como Dios quiere ser con nosotros. Él quiere pelear nuestras batallas por nosotros, y ayudarnos en todas las maneras posibles. Es por eso que necesitamos el amor y la fe de Dios—y como veremos—  ¡Nosotros también tenemos una batalla! ¡Debemos pelear la buena batalla de la fe!

 

1-Timoteo 6:11: “Pero tú, Oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y persigue justicia, piedad, fe, amor, resistencia y mansedumbre.” Todas estas cosas son el armamento de Dios, que nosotros utilizamos para la buena batalla de la fe. “…persigue justicia, piedad, fe, amor, resistencia y mansedumbre.”

 

Verso 12: “¡Pelea la buena batalla de la fe!...” ¡Porque Cristo está ahí para ayudar! ¡Dios peleará por nosotros! No debemos frustrarnos ni corroernos por los problemas y dificultades que vengan a nuestras vidas. Mejor llevémoslas ante Dios, y Él nos ayudará en todas las manera posibles. Vamos a ver que no hay nada que pueda estar nuestra contra; ¡Nada puede estar en nuestra contra!

 

“…Aférrate a la vida eterna a la cual también fuiste llamado, y profesaste una buena profesión en la presencia de muchos testigos” (verso 12).

 

Romanos 8 es un capítulo muy interesante. Éste es el capítulo que nos muestra la forma en la que debemos:

 

·                Crecer y vencer

·                Sacar el pecado

·                Sacar las cosas que nos estorban en nuestras vidas

·                Vencer nuestro pasado

·                Mirar hacia el futuro

·                Confiar en Dios

·                Ejercitar la fe de Dios

 

Romanos 8:14: “Porque tantos como son guiados por el Espíritu de Dios, esos son los hijos de Dios.” Esa es la meta continua que necesitamos. Debemos:

 

·                Dejar que Dios nos guíe

·                Dejar que Dios nos ayude

·                Dejar que Dios nos muestre

Lo cual viene por medio de:

 

·                La oración

·                El estudio

·                Rendirnos a Dios

 

Verso 15: “Ahora, ustedes no han recibido un espíritu de esclavitud otra vez hacia temor, sino han recibido el Espíritu de filiación, por el cual gritamos, ‘Abba, Padre.’” ¡Nosotros tenemos el engendramiento de Dios el Padre y el Espíritu de Jesucristo en nosotros! Los cuales nos dan:

 

·                Fuerza

·                Fe

·                Amor

·                Determinación

 

Vamos a ver que el resto de este capítulo es completamente irresistible en sus promesas, y en la seguridad que necesitamos.

 

Verso 16: “El Espíritu mismo da testimonio conjuntamente con nuestro propio espíritu, testificando que somos hijos de Dios. Entonces si somos hijos, somos también herederos…” (Versos 16-17). ¡Nosotros vamos a heredar el Reino de Dios! Y después… ¡Todas las cosas con Cristo!

 

“…—verdaderamente, herederos de Dios y coherederos con Cristo—si ciertamente sufrimos junto con Él para poder también ser glorificados junto con Él” (verso 17).

 

Es por eso que con el nuevo libro: De un Puntico de Polvo a un Hijo de Dios: ¿Por Qué Nació Usted?... Debemos mantenernos enfocados en la promesa de vida la eterna, de la gloria eterna, y del amor de Dios. ¡Ese es el objetivo delante de nosotros! Y ¡Así es como podemos vencer y vivir en un tiempo en el cual vendrán muchos problemas de todas partes!

 

Verso 18: “Porque considero que los sufrimientos del tiempo presente no son dignos de ser comparados con la gloria que será revelada en nosotros.”

 

·                No se desalienten

·                No se desanimen

No piensen que:

·                No van a lograrlo

·                Es muy difícil

 

Hágase una promesa a si mismo(a): ¡No más auto-compasión ni auto-lástima! ‘¡Ay de mí!’ Tome las Escrituras, póngase de rodillas, ore a Dios, aplíquelas a su vida, y pídale a Dios que le ayude y lo levante. ¡Él lo hará!

 

Miren lo que vamos a hacer cuando estemos en el Reino de Dios, verso 19: “Porque la más sincera expectativa de la creación misma está esperando la manifestación de los hijos de Dios.”

 

Todos los problemas de este mundo están esperando el regreso de Cristo y nuestra resurrección, para que todos los santos—quienes reinen y gobiernen con Cristo—puedan traer paz a este mundo. Piensen en esto:

 

·                La próxima vez que vean lo mal que están las cosas en las noticias

·                La próxima vez que se enteren de alguna tragedia

·                La próxima vez que vean algo espantoso

 

Recuerde que Dios nos ha llamado a usted, a mí, y a todos los santos… para que resolvamos estos problemas. Pero primero, debemos desarrollar el carácter de Dios— ¡el cual viene por fe!

 

Verso 20: “Porque la creación fue sujeta a vanidad, no voluntariamente, sino por razón de Quien la sujetó en esperanza.” Existe una organización llamada La Esperanza del Mundo, pero ¡La esperanza del mundo es Cristo! La esperanza del mundo son los santos de Dios trabajando con Cristo… ¡para traer paz a este mundo!

 

Verso 21: “Para que la creación misma pudiera ser librada de la esclavitud de corrupción hacia la libertad de la gloria de los hijos de Dios.” Piensen en lo grandioso que es esto hermanos. Vamos a ser liberados por una resurrección, para ser seres espirituales y llevar a cabo esto.

 

 Verso 22: “Porque sabemos que toda la creación está gimiendo y con dolores de parto juntamente hasta ahora.” Lean la historia del hombre para que vean lo que éste ha hecho, y cómo ha sido el mundo desde entonces. ¡Es un desastre! Los seres humanos hemos hecho de esta tierra, de nosotros mismos, de nuestros países, y de nuestras civilizaciones… ¡Un desastre lamentable! ¡Este mundo no es más que corrupción y pecado! ¡Pero nosotros debemos liberarlo!

 

Verso 23: “Y no solo eso, sino que incluso nosotros mismos, quienes tenemos los primeros frutos del Espíritu, también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la filiación—la redención de nuestros cuerpos. Porque por esperanza fuimos salvos…” (Versos 23-24). Debemos tener fe para que nuestra salvación esté completa en la resurrección.

 

“…pero la esperanza que es vista no es esperanza; porque ¿por qué alguien estaría aun esperando lo que ve? Pero si esperamos lo que no vemos… [Porque aún no ha sido completado] …nosotros mismos lo esperamos con paciencia” (versos 24-25). De fe hacia fe; de Dios hacia nosotros y de vuelta a Dios; ¡Nuestra relación con Dios!

 

Verso 26: “En la misma forma también, el Espíritu está conjuntamente ayudando nuestra debilidad porque no entendemos plenamente por qué cosa deberíamos orar, de acuerdo a como es necesario, pero el Espíritu mismo hace intercesión por nosotros con gemidos que no pueden ser expresados por nosotros.”

 

¿Qué significa eso? ¡Significa que el Espíritu Santo de Dios toma el corazón y el centro de nuestras oraciones—eliminando todas las distracciones que entran en nuestra mente—y las lleva ante Dios en una expresión espiritual que Él conoce y entiende!

 

El Espíritu Santo hace eso por nosotros. Cristo es nuestro intercesor a la mano derecha de Dios, pero el Espíritu Santo de Dios es el poder que hace posible esa intercesión en nuestras vidas.

 

Verso 27: “Y Aquel Quien busca los corazones comprende cuales son los esfuerzos del Espíritu porque ese hace intercesión por los santos de acuerdo a la voluntad de Dios. Y sabemos…” (Versos 27-28).

 

Ahora, quiero que de verdad entiendan el resto de este capítulo. Este es un capítulo que debemos leer frecuentemente para animarnos. Si usted llega a sentirse deprimido, decaído, abrumado, o no sabe qué hacer… lea este capítulo comenzando desde el verso 28, porque es de suma importancia para nosotros.

 

Verso 28: “Y sabemos que todas las cosas…” Incluyendo: los problemas, las dificultades, las pruebas—todas las cosas—no sólo algunas o la mayoría; no sólo las que Dios elige sino ¡todas las cosas!  

 

“…trabajan juntas para el bien de aquellos que aman a Dios… [Porque todo se resume en la importancia de amar a Dios] …para aquellos que son llamados de acuerdo a Su propósito” (verso 28). Nosotros hemos sido llamados por Él… y ¡Su propósito es que estemos en Su reino!

 

Verso 29: “Porque aquellos a quienes Él conoció de antemano… [Lo cual es ahora, porque Él nos conoce desde ahora y nos ha dado Su Espíritu] …también predestinó para ser conformados a la imagen de Su propio Hijo…” ¡Piénsenlo hermanos! Piensen en cómo será tener un cuerpo, mente, y gloria espirituales en la imagen de Cristo.

 

“…para que Él pudiera ser el primogénito entre muchos hermanos” (verso 29). ¡Nosotros vamos a ser los hijos e hijas de Dios el Padre, así como los hermanos espirituales de Jesucristo por siempre y para siempre!

 

Verso 30: “Entonces a quienes Él predestinó, a éstos también llamó; y a quienes Él llamó, a éstos también justificó; y a quienes Él justificó, a éstos también glorificó.” Este tiempo es lo que en el griego llamamos ‘profético perfecto’—significando que a los ojos de Dios (porque Él ha dado Su Espíritu) ¡si estamos en la fe es como si ya estuviera hecho!

 

·                ¡Nadie puede quitárselo!

·                ¡Nadie puede destruirlo!

·                ¡No hay nada que pueda interferir con eso!

 

Verso 31: “¿Qué diremos entonces a estas cosas? Si Dios es por nosotros, ¿quién puede estar contra nosotros?” ¡Piénsenlo! Si pudiéramos decirlo de otra forma: ¡Ya que Dios es por nosotros, nada puede estar contra nosotros!

 

Verso 32: “Quien no escatimó incluso a Su propio Hijo, sino que renunció a Él por todos nosotros, ¿cómo no nos otorgará también todas las cosas con Él?... [Cuando Cristo regrese] …¿Quién traerá una acusación contra el elegido de Dios?…” (Versos 32-33)—ni siquiera Satanás porque nosotros lo vencemos con la palabra de nuestro testimonio (por la sangre de Jesucristo), y porque amamos a Dios más que lo que amamos nuestras propias vidas. ¡Nadie puede traer acusación contra nosotros!

 

“…Dios es Aquel que justifica. ¿Quién es aquel que condena? Es Cristo Quien murió, más aun, Quien es alzado de nuevo, Quien está incluso ahora a la mano derecha de Dios, y Quien está también haciendo intercesión por nosotros” (versos 33-34). Ahí tenemos la combinación de la intercesión del Espíritu—de nosotros hacia Cristo, y de Cristo hacia el Padre.

 

Verso 35: “¿Qué nos separará del amor de Cristo?… [Y todas estas son situaciones circunstanciales]: …¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?… [Nada de eso] …En consecuencia, está escrito, ‘Por amor a Ti estamos muertos todo el día…’” (Versos 35-36). Y sí, muchos cristianos han sido asesinados… ¡Pero eso no es impedimento para Dios!

 

“‘…somos contados como ovejas para la masacre.’ Pero en todas estas cosas somos más que conquistadores a través de Quien nos amó. Porque estoy persuadido… [Y esta es la persuasión que necesitamos]: …que ni muerte, ni vida, ni ángeles… [Los ángeles de Satanás] …ni principados, ni poderes, ni cosas presentes, ni cosas por venir, Ni altura, ni profundidad, ni cualquier otra cosa creada, será capaz de separarnos del amor de Dios, el cual es en Cristo Jesús nuestro Señor” (versos 36-39).

 

¡Y ese hermanos, es el significado del último día de la Fiesta de Panes Sin Levadura!

 

·                ¡Dios peleará por usted!

·                ¡Dios lo rescatará!

·                ¡No se corroa!

·                ¡No se angustie!

·                ¡No esté celoso!

·                ¡No se preocupe!

·                ¡No sienta auto-compasión de si mismo(a)!

·                ¡Dios es por usted!

·                ¡Usted lo logrará!

 

Hermanos, ha sido una Fiesta maravillosa, y espero que estas cosas hayan sido de ayuda para ustedes. El fin de la Fiesta llegará a la puesta de sol.

 

 

Referencias Escriturales:

 

1)             2 Timoteo 4:1-4

2)             Levítico 23:4-6, 8

3)             Éxodo 13:17-22

4)             Éxodo 14:1-2, 8-26

5)             Éxodo 15:23-26

6)             Salmos 78:14-18, 30-41

7)             Salmos 3:1-4

8)             Salmos 25:17-22

9)             Salmos 33:18-20

10)         Salmos 34:1-7, 6, 8, 14-17, 6, 17-19

11)         Salmos 37:39-40, 1-9

12)         2 Reyes 19:3-7, 14-20, 32-36

13)         1 Corintios 10:1-14

14)         Efesios 6:10-12

15)         Filipenses 2:1-2, 5

16)         Gálatas 2:20

17)         Romanos 1:16-17

18)         Hebreos 4:12-16

19)         Hebreos 13:5-6

20)         1 Timoteo 6:11-12

21)         Romanos 8:14-39

 

Escrituras mencionadas, no citadas:

 

·                2 Reyes 18

·                Éxodo 31

 

También mencionados:

Libro: De un Puntico de Polvo a un Hijo de Dios: ¿Por qué nació usted? por Fred R. Coulter.

 

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